domingo, 22 de febrero de 2015

Bright punk

O te tomo como musa,o te convierto en veneno.
Te beberé de un trago, no lo dudes;
todavía busco un vicio pálido.

Quiero arrepentirme de mí mismo
y reflejarme en tu melena,
vivir sin un futuro
                            que se aleje
                                                de sábanas y arrugas tibias.

Vistes el mismo gris
que mis cielos favoritos
y mi ropa de batalla:
¿te escondes?
Pues los ojos no te dejan.

Para mí serías peor
que una colilla alquitranada,
y mira que odio el tabaco,
pero te fumaría hasta los huesos.
Tú no tienes la culpa
soy solo yo
                  que me afano
                                        en tocar fondo,

y en llorar tanto y tan fuerte
que mi guitarra no lo ahogue,
y en seguir dándome pena
por no saber olvidar.
Por no entender
                         que como ella
                                                 no habrá nadie.

viernes, 20 de febrero de 2015

Unlighted and breached (elegía de vergüenza)

Si escribiera sin pensar,
no lo haría con tinta,
sino con sangre;
hoy he amanecido en rojo,
y no sé si se lo debo
al camarada Vladimir,
o a que mi maldito diente
se clava igual en mí
que todo lo que he hecho mal
en el tiempo en que se seca un clavel.

Me sabe la boca a metal,
quizá porque el corazón se asoma fuera,
y le gusta el panorama.

Por otro lado, no me extraña.
El viento se vuelve en contra,
los adoquines se levantan
y te hacen tropezar,
la ciudad que pintas nunca será bastante hermosa,
y todo ello nos arrastra
a una solución desesperada.

La mejor opción sería
entregarme a un nuevo vicio,
arrepentirme del camino,
abrazarme a un cuerpo cálido,
fingir que amo,
arrepentirme después,
y volverlo a hacer.

jueves, 19 de febrero de 2015

Fluorescent Girl (ABCBCBCA CBACACBC)

Ladrillo tras ladrillo reluciente de hilos rojos,
entintados en la noche de diez labios de neón,
no recogen tu camino de pisadas de ángel triste,
de caricias destructoras como ruedas de camión.
Como sangre fluorescente del corazón que perdiste,
que acabó abrazado al mío entre cenizas de pasión.
Nunca llegaré a saber si fuiste dulce por despiste,
o si fueste tan traidora para verme hecho un despojo.

¿Volverás a amenazarme, belladona azul en ristre,
o me soplarás sin odio como a un diente de león?
No me creo que aún te quede ni una pizca de tu arrojo;
se quedó en los pliegues negros de la noche que desvistes,
en los brillos rosa y blanco de tu ajuar frente a mis ojos.
En mi pecho empalizado establezco mi bastión,
asfixiado en las canciones que hace un siglo que me diste.

viernes, 13 de febrero de 2015

Ash and marble muse

Tu sagrado pelo de arce besa el suelo,
y en el cielo de tu pecho que persuade,
con tu pálido calor remonto el vuelo,
y de tu ropa de niebla mis manos son clave.

martes, 10 de febrero de 2015

Soneto retorcido

Mi lápiz ya no significa nada.
Soy apenas un actor muñequizado,
descolgado por la oscura balaustrada,
sostenido por los versos más delgados.

Quiero volver a volar medio torcido,
a despojarte de tus ropas grises,
y a hacerte el amor, y caer rendido.

Ya me veo en una lucha encarnizada
contra una parte de mí que había olvidado;
dice que esta solución desesperada
no suple al ángel del que me he separado.

Y es que me harta vivir medio dormido.
Mi corazón frente a esos ojos no resiste,
y solo en mi propia noche estoy perdido.

Qué arma esconderá en su ropa holgada,
que libera más sangre que una espada.

domingo, 8 de febrero de 2015

Oxford's Angels (sueño artificial)

mirando, estupefacto, el reencuentro entre el verde de las hojas mecidas por el Soplo y el ámbar del astro que devolvía el color a la materia conforme empezaba a asomar su cumbre por una región aleatoria del horizonte.

-Define lo que es una familia -aquella amigable exigencia puso en marcha su mente.
-Una lámpara -dijo después de un momento-. Un azulejo.
-Pero no para un tiburón.

El huevo del sol, ya totalmente separado de la línea de tierra, ocupó de repente un espacio protagonista en la pantalla. Lo señaló.

-Eso sí. Pero no para una planta.

Hizo un amplio gesto hacia la hierba y los árboles.

-Te acercas. Sigue insistiendo.

Se incorporó sobre los adoquines luminiscentes que marcaban camino en aquel barrio de la noche, empujando las sombras hacia las esquinas. Caminó a su lado.

-¿Los tiburones sienten a su familia?
-Posiblemente no.

Los fluorescentes del autobús sangran un resplandor blanco verdoso que les separa toscamente del exterior sórdido y melancólico. Mira a una chica, apoyada contra la ventana unos metros más adelante. Sonríe, le devuelve la mirada y baja la cabeza, con la curva de sus labios aún iluminando su cara. Finge recolocarse los auriculares y abstraerse. Es bonita.

-Entonces la familia es lo que tú elijas.
-No. Matiza. Cambia de pincel.

Entrecierra los ojos para tamizar la luz solar, que tras una larga mañana ha logrado arañar las densas nubes, y empiez a dar calor a las calles y edificios. Sus piernas cuelgan por el borde de la cornisa de cemento de la azotea. La ciudad se ve de otra manera. Él prefiere quedarse de pie.

-Es todo lo que quieres, o que te quiere.
-Tal vez. Creo que casi estás.

Se gira para mirarle a los ojos.

-Lo que te ayuda... a seguir.
-Y que te recuerda dónde estás.

Calla un instante y sonríe.

-Una devonía.

Nueva sonrisa.

miércoles, 4 de febrero de 2015

Cuartetos sueltos

Las muchas razones por las que había dejado esto un poco abandonado tuvieron relación con los estudios, la falta de inspiración y el estado anímico en general. Pido disculpas.

Os presento tres cuartetos sueltos que me gustan particularmente (estoy aprendiendo a rimar). Pronto seguiré subiendo cosas:

Alzado contra tus labios de agua,
enfrentado a tu mirar infinito,
me veo deshojado, hecho trizas;
no te veo alrededor, muero, grito-


Un dirigible henchido en plomo,
un trozo de arce torrefactado,
ojos de halcón, cadenas frías,
un corazón polvoriento y desenchufado-


Seis caricias de verde viento,
tu mar azul sobre mi atardecer,
mis luces rojas de piel de cemento,
tus ojos de neón, y nada que perder.